viernes, 31 de agosto de 2012

¿SE PUEDE TERGIVERSAR TANTO UN CASO DE “LIBERTAD CONDICIONAL”?


 
NO IMPORTA SÓLO LA SITUACIÓN DE LA SALUD, SINO TAMBIÉN EL “PRONÓSTICO DE REINSERCIÓN”


 
D. José Luis Castro Antonio, Magistrado-Juez titular del “Juzgado Central de Menores (con funciones de Vigilancia Penitenciaria”), ha resuelto, por Auto de 30 de agosto de 2012, lo siguiente: “se aprueba la propuesta de libertad condicional elevada por la Junta de Tratamiento del Centro Penitenciario de Álava y se concede el beneficio de libertad condicional al penado JESÚS MARÍA URIBECHEVARRIA BOLINAGA, vía art. 196.2 del Reglamento Penitenciario”. Para abreviar, me referiré a este criminal por su segundo apellido, Bolinaga. Si quisiesen leer entero el Auto, vayan a

Los más veteranos lectores de este “blog” quizás habrán observado que muy pocas veces entro en asuntos relativos al terrorismo de ETA, a los etarras y a su entorno. Hay sobreabundancia de comentarios de todo tipo en torno a ese criminal fenómeno y, como es explicable, frecuentemente lo político invade y desfigura lo jurídico. Hago hoy una excepción porque he sentido curiosidad por los aspectos jurídicos (y médico-juridicos) de este asunto de la libertad condicional de Bolinaga y, tras informarme, me ha parecido penosa la confusión difundida y veo algo sobre lo que apenas se ha dicho nada, cuando, a mi parecer, resulta de lo más llamativo y poco explicable.

Diré, para empezar, que no entiendo a qué ha venido tanta discusión sobre el estado terminal, o no, del etarra Bolinaga, condenado a 32 años de cárcel por secuestro (fue uno de los verdugos-torturadores del funcionario de prisiones, Sr. Ortega Lara, que fue privado de libertad, en condiciones sumamente penosas, durante 532 días), a 145 años de cárcel por atentado mortal contra dos guardias civiles (1987) y a 33 años por asesinato de otro guardia civil (1993). Permanece en prisión ininterrumpida desde el 6 de julio de 1997.

Según el art. 92.1, pfo. segundo del Código Penal (CP), la libertad condicional se puede decretar “cuando, según informe médico, se trate de enfermos muy graves con padecimientos incurables”. No hay que decir que ese precepto legal no exige que el preso se encuentre en situación “terminal”, que puede no darse y, de hecho, no se da en muchísimas personas que padecen enfermedades muy graves e incurables. Personas aquejadas de enfermedades susceptibles de calificarse, sin duda, de “muy graves” y de “incurables”, pueden hallarse muy lejos de encontrarse en la situación que médicamente se considera “terminal”.  Así, por poner un solo ejemplo, los enfermos de SIDA. Por otra parte, tampoco “terminal” es lo mismo que “agónico”, de modo que el Magistrado-Juez Castro podría haberse ahorrado algunos párrafos sobre la condición agónica en su prolijo Auto de 15 folios. Bolinaga se encuentra actualmente aquejado de carcinoma renal con metástasis pulmonar y cereberales. Se trata, sin duda, de una enfermedad muy grave y, además, incurable o “con muy mal pronóstico”, lo que, al parecer, consideran equivalente al carácter incurable (aunque, desde luego, no lo es: una enfermedad que se cura raramente no es propiamente incurable).

Demos por bueno, no obstante, que Bolinaga se encuentra en la situación del art. 92.1 pfo. segundo CP. Sucede, sin embargo, que el mismo art. 92.1, en su pfo. primero, exige reunir “los requisitos establecidos, excepto el haber extinguido las tres cuartas partes de aquélla o, en su caso, las dos terceras” y esos “requisitos establecidos” son los del art. 90 CP, menos el de la letra b), que se refiere a lo que se lleve cumplido de condena. De modo que, quedan, el de la letra a), “que se encuentren en el tercer grado de tratamiento penitenciario”, requisito que cumplía Bolinaga, pero también el de la letra c): “que hayan observado buena conducta y exista respecto de los sentenciados un pronóstico individualizado y favorable de reinserción social, emitido en el informe final previsto en el artículo 67 de la Ley Orgánica General Penitenciaria." 

Es muy importante señalar que Bolinaga fue clasificado en el tercer grado de tratamiento penitenciario amparándose en el caso especial del aptdo. 4 del art. 104 del Reglamento Penitenciario (RP): “los penados enfermos muy graves con padecimientos incurables, según informe médico, con independencia de las variables intervinientes en el proceso de clasificación, podrán ser clasificados en tercer grado por razones humanitarias y de dignidad personal, atendiendo a la dificultad para delinquir y a su escasa peligrosidad.”

El aptdo. 3 del art. 92 CP dispone que “si el peligro para la vida del interno, a causa de su enfermedad o de su avanzada edad, fuera patente, por estar así acreditado por el dictamen del médico forense y de los servicios médicos del establecimiento penitenciario, el Juez de Vigilancia Penitenciaria podrá, previa en su caso la progresión de grado, autorizar la libertad condicional sin más trámite que requerir al centro penitenciario el informe de pronóstico final al objeto de poder hacer la valoración a que se refiere el párrafo anterior, todo ello sin perjuicio del seguimiento y control previstos por el artículo 75 de la Ley Orgánica General Penitenciaria."

Aparte de otras consideraciones y de matices no irrelevantes que podrían formularse sobre la aplicabilidad al caso del 92.3 CP, hay algo innegable, que es esto: se siga la vía del art. 92.1 pfo. primero o la del 92.3, siempre del Código Penal, resulta que es preciso en todo caso un “pronóstico final” y un pronóstico de reinserción social o, como el mismo Magistrado Castro recuerda, evocando el art. 104.4 RP, “de escasa peligrosidad del penado”, a la que el Magistrado añade “dificultad para delinquir”.

¿Es posible que, conforme a la recta razón y al conocimiento de los datos del caso, se haya emitido un pronóstico final de reinserción social favorable respecto de Bolinaga, que sigue siendo un etarra confeso y activo, que se encuentra estable y con escasos síntomas clínicos de su muy grave enfermedad? ¿Es posible que se predique de este sujeto “su escasa peligrosidad” cuando hace quince años, siendo conducido a Madrid, cuando el vehículo policial rebasaba a dos guardias civiles de tráfico, se abalanzó sobre el conductor para hacerle arrollar a estos guardias, sin importarle lo que pudiera ser de él? Si se le pone en libertad condicional, ¿no dispondrá Bolinaga de una ventana, por así decirlo, de unos cuantas semanas, en las que podría llevar a cabo grandes fechorías, sangrientas o no? Las preguntas, como habrán comprendido los lectores, son meramente retóricas. El auto del Magistrado Castro pasa de puntillas sobre la "escasa peligrosidad" y sobre la "dificultad para delinquir". de Bolinaga. Pasa de puntillas porque si mañana fuese puesto en libertad Bolinaga, no tendría, previsiblemente, mayor "dificultad para delinquir" durante semanas o meses. Sobre la "escasa peligrosidad" de Bolinaga no se extiende el Magistrado. ¿Qué podría decir? A mí me parece muy bien, en general, que los presos gravemente enfermos, también los que cumplen condena por gravísimos delitos, puedan pasar sus últimos días o semanas -sin necesidad de esperar a que hayan entrado en agonía- en su casa o donde quieran. Pero, como viene a decir la Ley, siempre y cuando no puedan hacer daño.

Desde el punto de vista médico, Bolinaga está por empezar un tratamiento que no es estrictamente paliativo, según le han aclarado al Magistrado Castro los médicos donostiarras que atienden al etarra. Que el tratamiento no se le pueda aplicar adecuadamente en la enfermería de una institución penitenciaria, ¿exige concederle el beneficio de la libertad condicional? A mí me parece, sin lugar a dudas, que la respuesta ha de ser negativa. Porque la alternativa, respecto de la salud de Bolinaga, no es o cárcel o libertad. Bolinaga podría seguir siendo tratado en el Hospital de San Sebastián, donde hoy se encuentra, privado de libertad, como ya estuvo antes en un Hospital de León. Desde el punto de vista médico, esa hospitalización, con el control constante de su evolución, sería además, preferible que enviarle a su casa amonestándole para que vaya a este o a aquel centro hospitalario según citas diversas. Si peligra la vida del interno Bolinaga, ningún sitio mejor que un hospital, pero privado de libertad mientra sea peligroso.

Termino con la reproducción de pfo. tercero del art. 90 CP: “en el caso de personas condenadas por delitos referentes a organizaciones y grupos terroristas y delitos de terrorismo del Capítulo VII del Título XXII del Libro II de este Código, o cometidos en el seno de organizaciones o grupos criminales, se entenderá que hay pronóstico de reinserción social cuando el penado muestre signos inequívocos de haber abandonado los fines y los medios de la actividad terrorista y además haya colaborado activamente con las autoridades, bien para impedir la producción de otros delitos por parte de la organización o grupo terrorista, bien para atenuar los efectos de su delito, bien para la identificación, captura y procesamiento de responsables de delitos terroristas, para obtener pruebas o para impedir la actuación o el desarrollo de las organizaciones o asociaciones a las que haya pertenecido o con las que haya colaborado, lo que podrá acreditarse mediante una declaración expresa de repudio de sus actividades delictivas y de abandono de la violencia y una petición expresa de perdón a las víctimas de su delito, así como por los informes técnicos que acrediten que el preso está realmente desvinculado de la organización terrorista y del entorno y actividades de asociaciones y colectivos ilegales que la rodean y su colaboración con las autoridades.” ¿Puede Bolinaga acogerse a algún extremo de esta norma?

Se dirá tal vez que ese precepto no es aplicable a los casos del art. 92 CP. A mí me parece que sí es aplicable, porque se refiere a los requisitos para la libertad condicional y esos requisitos son exigibles, salvo uno de ellos (cumplimiento de parte de la condena) en los casos del art. 92 CP. En todo caso, es una norma reveladora de lo que se exige para un pronóstico de reinserción social a penados como Bolinaga. Personalmente, yo sería menos exigente: sólo exigiría que fuese segura la ausencia de peligrosidad. Las víctimas -directas o indirectas- no tienen (o no tenemos) derecho a la venganza. De acuerdo. Pero todos tenemos derecho, por así decirlo, a que no se libere a quien está cumpliendo una pena privativa de libertad si aún puede delinquir y todavía es peligroso. En estas condiciones, las "razones humanitarias" no se dan en realidad. 

Sólo falta decir que la Fiscalía de la Audiencia Nacional pudo recurrir la clasificación de Bolinaga en tercer grado de tratamiento penitenciario y no lo hizo. El Magistrado Castro lo recuerda y no sé si lo reprocha. Aunque la incoherencia de la Fiscalía no  me asombre, a mí sí me parece que esa inactividad fiscal merece reproche y no leve. El Magistrado ha pasado una vez por encima de la ausencia de un fundado pronóstico de reinserción y del requisito de la falta de peligrosidad, pero la Fiscalía lo ha hecho dos veces: al no recurrir la clasificación de Bolinaga en tercer grado de tratamiento penitenciario y al fundar su informe al Magistrado, desfavorable a la libertad condicional de Bolinaga, en la ausencia en éste de la condición de enfermo terminal, condición que la ley no exige (cosa que los Fiscales debieran saber).

No sé si esta chapuza múltiple, lógica, médica y jurídica, de la Fiscalía y del Juez, se inscribe, o no, en una política gubernamental respecto de ETA (que, personalmente, no podría ni siquiera entender). No es que no quiera pronunciarme, por unos u otros motivos: es que, de verdad, no lo sé. Lo que sé -o me parece saber- es que aquí hay un exceso de incompetencia jurídica, profesional. De principio a fin: desde Instituciones Penitenciarias hasta el Juzgado. El yerro puede enmendarse, pero será preciso explicar muy bien al órgano judicial competente para la apelación todo lo que ha fallado en la aplicación de la ley, sin teñir el recurso de visceralidades o de vericuetos extrajurídicos de ningún tipo.

jueves, 23 de agosto de 2012

ESPAÑA: TIEMPO DE ESTUDIAR EN SERIO SALIRSE DE LA EUROZONA


 
 
LA POLÍTICA ALEMANA YA NO SE PUEDE ACEPTAR



Vuelvo sobre la situación económica porque estamos a pocos días de momentos decisivos. Decisivos, no para un país entero, sino también para cada uno de nosotros. Estas lecturas de agosto, tan “económicas”, tratan, no tengo duda, sobre lo que más importa y cuando más importa. Así que los asuntos y asuntillos domésticos, quizá con más morbo, deben ceder el paso a la encrucijada histórica.

 
Vengo diciendo aquí, desde hace más de un año, que Alemania y, en concreto, su Canciller federal, Angela Merkel, tiene una gran responsabilidad en lo que nos ocurre y, sobre todo, en nuestro futuro inmediato (incluido el de la misma Alemania y el de Europa). Durante un tiempo, pensé que Frau Merkel no entendía hasta qué punto su actuación respecto de España e Italia comprometía el futuro de la misma Alemania. Después dije que era inaceptable el trato político que recibíamos e hice ver -siempre a la vez que reconocía muy grandes y en parte persistentes errores españoles- que no éramos, sin embargo, ni los únicos ni los principales responsables de la crisis. Y he terminado por estar seguro de que, a ciencia y conciencia, Alemania es en grandísima medida responsable de la crisis europea y que esa nación y sus satélites (especialísimamente el Banco Central Europeo, de Don Draghi) están buscando nuestra ruina en su propio provecho. Lamento mucho llegar a este convencimiento, pero no puedo evitarlo.

(Si quieren, repasen los cuatro siguientes “post”:
12 de agosto de 2011: MENSAJE A DÑA. ANGELA MERKEL: NO TODOS LOS ESPAÑOLES SOMOS ZAPATERO:  http://andresdelaoliva.blogspot.com.es/2011/08/mensaje-dna-angela-merkel-no-todos-los.html;

18 de noviembre de 2011: LA EXPLOSIVA MEZCLA DE UN ENORME CRIMEN Y UNA GIGANTESCA INCOMPETENCIA (y II):  http://andresdelaoliva.blogspot.com.es/2011/11/la-explosiva-mezcla-de-un-enorme-crimen_18.html

4 de junio de 2012: NI LOS ERRORES AJENOS EXCUSAN LOS PROPIOS, NI LOS PROPIOS BORRAN LOS AJENOS: http://andresdelaoliva.blogspot.com.es/2012/06/ni-los-errores-ajenos-excusan-los.html
15 de julio de 2012: EL "CÍRCULO INFERNAL" PARA INTERVENIR Y COMPRAR ESPAÑA (I): http://andresdelaoliva.blogspot.com.es/2012/07/el-circulo-infernal-para-intervenir-y.html)

Parece necesario decir que la República Federal de Alemania no ha sido ni es la Cruz Roja ni una ONG humanitaria y sin ánimo de lucro; sus bancos han prestado y han comprado títulos y valores a quien libremente han querido prestar y comprar; las empresas alemanas han hecho lo que han querido; se desconocen entregas masivas de productos alemanes a título gratuito; se desconocen impagos masivos del precio de productos alemanes y nadie se ha atrevido ni a sugerir que Alemania se desangraba como una mamá pelícano para que con su sangre se alimentasen otros países, sus poyuelos. No: legítimamente, Alemania estaba y está a sus bussines.

Jamás he sido germanófobo, sino más bien todo lo contrario. De mi respeto, afecto y admiración por Alemania hay abundantes pruebas en mi curriculum vitae (incluido, claro, el historial profesional) y, desde luego, en bastantes de mis aficiones. Pero los hechos relevantes que componen una evolución histórica y una situación actual no se pueden trocear, para tachar buena parte de ellos, simplemente porque, de un modo u otro, se ha contraído una absoluta, pertinaz y sistemática germanofilia, que genera intolerancia aguda a cualquier crítica a Alemania.

No entiendo, pero no me gusta, esa inclinación de bastantes de nuestros intelectuales (en sentido amplio: gente que trabaja sobre todo con la cabeza) a la autoflagelación, esto es a fustigar sin piedad lo español (la historia, los hábitos de la gente, nuestros defectos supuestamente exclusivos), porque, dicen, conocen muy bien España, mientras casi todo lo extranjero-europeo les parece perfecto, aunque sólo lo conozcan superficialmente y no admitan matices críticos procedentes de quienes conocen bien lo francés, lo italiano o lo alemán. Es paradójico cómo esos intelectuales pueden con tanta frecuencia incurrir en los más manidos lugares comunes favorables a lo alemán (el orden, la laboriosidad, la eficiencia, por ejemplo) mientras se precipitan a generalizar los tópicos desfavorables a lo italiano, lo francés y lo español.

A veces tengo la impresión de que personas de mucha calidad intelectual creen que evitar todo nacionalismo -propósito impecable- implica carecer de patriotismo. Caen en una gran atonía emocional y en cierto empobrecimiento de la personalidad y de su intelecto. Pero lo curioso es que no reparten su frialdad equitativamente, sino que la reservan para las cosas de su país, si es que cabe atribuirles alguno (a veces sí: vibran con su aldea).

Viene esto a cuento de la guerra de opinión inter-eurozona y de la sumaria descalificación que algunos pretenden de toda posición netamente crítica de la actual actitud de los dirigentes económicos y políticos alemanes. Voy a decirlo con claridad: no he sentido ni siento satisfacción alguna en la crítica, pero me reafirmo en ella: lo que Alemania, en cuanto Estado, está haciendo en estos momentos es económicamente muy torpe y políticamente rastrero. Alemania es el motor, la locomotora y la potencia de Europa. Cierto. Pero precisamente por eso está fallando clamorosamente en su papel. Europa necesita un liderazgo y Alemania no sólo no lo proporciona (pase: nadie da lo que no tiene), sino que manda en Europa y quiere seguir mandando pese a carecer de un proyecto de Europa... o, si lo tiene (que probablemente lo tendrán los políticos y los banqueros), lo oculta, lo que aún es peor. Vemos politiquería aldeana, cercana al nacionalismo, en quien habría de aportar, si no un liderazgo magnánimo como el que precisa la construcción de Europa, al menos alguna clara señal de comprender que eso es lo que Europa necesita.

Alemania, que -insisto- nunca ha sido una ONG humanitaria a la que los demás hayamos explotado sin vergüenza ni consideración, mientras ella se desangraba, no es ya ahora lo que era ni va camino de seguir siendo una "gran nación". Salvo que rectifique a fondo, va a entrar en crisis (mientras termino este “post” llegan noticias en ese sentido). Y los dirigentes actuales no serán quienes la saquen de ella.

Pues bien, además de que esto que a algunos se nos ocurre aquí en la Europa meridional, lo tienen muy claro al otro lado del Atlántico, como han podido comprobar con los dos “post” anteriores, prosiguen los análisis que ponen bastante al descubierto a qué se dedican los dirigentes políticos y bancarios alemanes. Ahora verán.

A propósito de una interesante noticia -la negativa a invertir de uno de los principales fondos de inversión del mundo, que ha devuelto dinero a sus clientes- he encontrado un texto en el que se plantea debate acerca de la implicación de la política en la economía y sobre la predictibilidad de una y otra. Pero, más allá de estas interesantes cuestiones -pero probablemente de tan largo tratamiento como interés-, el texto contiene una exposición del nacimiento, desarrollo, presente y futuro de la Unión Europea en relación con el interés político de Alemania. Como ahora, en el seno de la UE, cualquier posición (favorable o contraria) sobre la actuación de Alemania es devaluada como sospechosa de beligerante, este texto, del 7 de agosto de 2012, titulado “Financial Markets, Politics and the New Reality”, escrito por un analista estadounidense, George Friedman, me parece importante. George Friedman -sin parentesco con Milton F.- es el fundador y director ejecutivo de la empresa de análisis geopolítico Stratfor y está muy al corriente, por su experiencia y su trabajo, de lo que sucede en este mundo tan complejo. Lo que Friedman dice es muy discutible, pero, desde luego, no se trata de un indocumentado cantamañanas. V. http://www.stratfor.com/

Aunque seguimos en agosto, he cortado el texto, porque la crítica a los inversores por no entender lo que el autor ve tan claro -la predictibilidad de las conductas políticas- no tiene mucho que ver con nuestro asunto.

Pero antes de copiar, les confiaré que, cada día que pasa con este chalaneo a propósito de Europa y del euro, menos me gusta y, sobre todo, menos atractiva y viable me parece la Europa que sostiene Alemania. Y como estamos en una encrucijada de tremenda incertidumbre, me viene cada vez más a la cabeza la idea de que podrían ser preferibles los riesgos de salir de un proyecto desagradable y de muy incierto futuro a los riesgos de seguir atados a tal proyecto. Porque los costes de irnos serían muy altos a corto y medio plazo, pero muy altos y no sólo a corto y medio plazo son también los costes de quedarnos en la eurozona, de cuyo futuro o buen fin dudan tantas personas inteligentes. Según muchos analistas, extraeuropeos ellos, probablemente no estaríamos solos en el abandono del euro. Salirse del euro sería durísimo, pero ¿no lo está siendo y lo será, al menos por igual, permanecer en la eurozona? Repito que habría que estudiar muy a fondo el dilema y el Gobierno español debería movilizar esfuerzos en esa línea, sin ocultarlo, sino todo lo contrario. No debe ser la previsión de una emergencia inevitable, sino el estudio serio de una opción tan importante como la contraria.

Ahora ya copio a G. Friedman (como otras veces, negrita, cursiva y  subrayado son míos):

«“Louis M. Bacon es la cabeza de Moore Capital Management, uno de los hedge funds [AOS: trad. aprox.: fondos de inversión de alto riesgo] más grandes e influyentes del mundo. La semana pasada anunció que devolvía una cuarta parte de su fondo más grande, alrededor de dos mil millones de dólares, a sus inversores. La razón que dio al The New York Times fue que había encontrado dificultades para invertir, dada la imposibilidad de predecir la situación europea. Se citó a Bacon así: "La implicación política es tan extrema... no hemos visto algo semejante desde la posguerra. Lo que están haciendo es tratar de frustrar los resultados naturales del mercado. Es asombroso lo importante que la adopción de decisiones de una sola persona, Angela Merkel, ha llegado a ser para los mercados mundiales".»

«El objetivo de los fondos de cobertura es ganar dinero y lo que Bacon vino a decir fue, esencialmente, que no se puede ganar dinero cuando hay una fuerte implicación política, porque esa implicación introduce incertidumbre en el mercado. Por tanto, la inversión prudente se vuelve imposible. Los hedge funds se han convertido en críticos para la asignación mundial de capitales debido a que sus acciones influyen en otros actores importantes y a que su falta de voluntad para invertir y negociar tiene importantes implicaciones para la disponibilidad de capital. Si otros siguen el ejemplo de Moore Capital, como lo harán, habrá mayores dificultades para reunir el capital suficiente para hacer frente al problema de Europa

«Pero lo más interesante es el razonamiento. Las palabras de Bacon entrañan la idea de que las decisiones políticas son impredecibles o menos previsibles que las decisiones económicas. En lugar de ver a la Canciller alemana Merkel como prisionera de fuerzas ajenas al mercado, que limitan sus acciones, los inversores convencionales parecen pensar que Europa está ahora sujeta a los caprichos de Merkel. Yo diría, por el contrario, que las decisiones políticas son predecibles y que Merkel,  más que tomar decisiones, está siendo el  reflejo de las fuerzas impersonales que la dirigen. Cuando se comprenden esas fuerzas impersonales, es posible predecir comportamientos políticos, como se pueden predecir comportamientos del mercado. No es una ciencia exacta, pero si se hace correctamente, tampoco es imposible.»

«Para hacer esto, se debe comenzar por entender dos cosas. La primera es que la política y los mercados siempre interactúan. El verdadero fundamento del mercado -la sociedad de responsabilidad limitada- es político. Lo que muchos toman como natural es en realidad un mecanismo político que permite a los inversores limitar su responsabilidad. El modo en que se limita la responsabilidad es una cuestión jurídica, no una cuestión de mercado, y está diseñada por los políticos. La estructura de riesgo en la sociedad moderna gira en torno a la sociedad mercantil y la sociedad es un artificio de la política en dependencia de los riesgos. No hay nada natural acerca de las leyes societarias de una nación y son esas leyes las que definen los mercados.»

«Hay tiempos en que la política deja en paz esas leyes y no las cambia y tiempos en que la política se entromete. La última generación ha sido un tiempo único en el que la prosperidad de los mercados permitió a la estructura legal permanecer en general intacta. Después de 2008,  esa estabilidad ya no fue posible. Pero la implicación política activa en los mercados es en realidad la norma, no la excepción. Los inversores contemporáneos han visto una una dramática excepción -la última generación- y, con falta de sentido histórico, la han confundido con la norma. Eso explica la incapacidad de los inversores actuales para hacer frente a las cosas que las generaciones anteriores que se enfrentaban constantemente.»

«El segundo punto de partida es el reconocimiento de que pensadores como Adam Smith y David Ricardo, que tanto admiran los inversores modernos, entendieron perfectamente lo que decimos. Ellos nunca utilizaron el término "economía" por sí solo, sino únicamente en relación con la política y lo llamaron economía política. El término "economía" no apareció solo hasta la década de 1880, cuando un grupo llamado los Marginalistas buscaron matematizar la economía y lanzarla, libre de la política, como una ciencia social autónoma. La cuantificación de la economía y las finanzas condujeron a la creencia -nunca sostenida por hombres como Smith- de que había una esfera independiente de la economía en la que política no se entrometía y que las matemáticas permitían a los mercados ser predecibles, con tal de que la política no pudiese interferir.»

«Dado que la política y la economía nunca se pueden separar, las matemáticas nunca fueron tan predictivas como se había pensado. (…)»

«El mundo no es imprevisible y no lo es ni Europa ni Alemania. La cuestión no es ni lo que los políticos dicen que quieren hacer ni lo que secretamente desean hacer. De hecho, no es la comprensión de lo que harán. Más bien, la clave para predecir el proceso político es la comprensión de las limitaciones: las cosas que no se pueden hacer. La idea de los inversores de que los mercados se hacen impredecibles por la política falla en dos puntos. El primero, que no ha habido un mercado independiente de la política desde que la sociedad de responsabilidad limitad (corporation) fue inventada. El segundo, que la política y la economía son ambas empresas humanas y, por lo tanto, ambos tienen un grado de previsibilidad.»

«Las limitaciones de Merkel»

«La Unión Europea se creó por razones políticas. Las consideraciones económicas fueron un medio para un fin y ese fin era detener las guerras que habían destrozado Europa en la primera mitad del siglo XX. La clave era unir Alemania y Francia en una alianza inquebrantable basada en la promesa de la prosperidad económica. Quien no entienda los orígenes políticos de la Unión Europea y se centre sólo en lo económico no puede comprender cómo funciona la UE y resultará sorprendido por las acciones de sus políticos

«La Europa de posguerra se desarrolló al reanudar Alemania su prebélico papel de potencia exportadora masiva. Para los alemanes, las primeras versiones de la unificación europea se convirtieron en la base para la solución del problema alemán, que era una capacidad productiva de Alemania que sobrepasaba su capacidad de consumo. Alemania tenía que exportar para sostener su economía y toda barrera al libre comercio amenazaba a los intereses alemanes. La creación de una zona de libre comercio en Europa era el imperativo fundamental y cuantas más naciones abarcaba esa zona de libre comercio, más mercados más estaban disponibles para Alemania. Por lo tanto, Alemania se mostró agresiva en la ampliación de la zona de libre comercio

«Alemania fue también un gran defensor de las normas a escala europea en áreas tales como la política de empleo, política ambiental y otras. Estas políticas protegen a las grandes empresas alemanas, que son capaces de absorber los costes, de la competencia empresarial del resto de Europa. El aumento del costo de la entrada en el mercado era una parte importante de la estrategia de Alemania

«Por último, Alemania fue la campeona del euro, una moneda única controlada por un solo banco sobre el que Alemania tenía una influencia proporcional a su importancia. La moneda única, que se centra en evitar la inflación, ha protegido a los acreedores alemanes contra los países europeos dificultando su salida de la deuda. La deuda estaba denominada en euros, el Banco Central Europeo controlaba el valor del euro y los países europeos, dentro y fuera de la eurozona, estaban atrapados en esa política monetaria.»

«Mientras hubo prosperidad, los problemas subyacentes del sistema estuvieron ocultos. Pero la crisis de 2008 puso de manifiesto los problemas. En primer lugar, la mayoría de países europeos tenían importantes saldos comerciales negativos con Alemania. En segundo término, la política monetaria europea se centró en la protección de los intereses de Alemania y, en menor medida, de Francia. El régimen regulatorio creó una rigidez sistémica, que protegió a las grandes compañías existentes.»

«En estas circunstancias, la política de Merkel le fue impuesta a Merkel por la realidad. Alemania era y es totalmente dependiente de sus exportaciones y sus exportaciones a Europa son críticas. Tenía y tiene que asegurarse de que la zona de libre comercio se mantenga intacta. Después, tenía y tiene que reducir al mínimo el coste para Alemania de la estabilización del sistema desplazándolo hacia otros países. Merkel ha tenido que convencer a sus compatriotas de que la crisis era debida a los libertinos del sur de Europa y de que no iba a permitir que se aprovechasen de los alemanes. La verdad es que la crisis fue causada por Alemania, utilizando el sistema de comercio para inundar los mercados con sus bienes, con limitación de la competencia mediante regulaciones y, así, por cada euro descuidadamente pedido en préstamo, un euro se prestó sin cuidado. Como buen animal político, Merkel creó el mito de los griegos astutos engañando al confiado Deutsche Bank examinador

«Dejando a un lado la retórica, la toma de decisiones de Merkel estaba clara. En primer lugar, en ningún caso podía permitir a ningún país salir de la zona de libre comercio de la Unión Europea. Una vez que empezase la salida no podría predecir dónde iba a terminar, excepto que terminaría en una catástrofe alemana. En segundo lugar, por razones económicas y políticas, tenía que ser lo más agresiva posible con los prestatarios morosos. Pero nunca tan agresiva como para provocar que esos prestatarios decidan que tiene más sentido el default (la suspensión de pagos) y la retirada que permanecer en el sistema

«Merkel no ha estado tomando decisiones (según su arbitrio): ha estado actuando conforme a un guión que había sido inscrito en la estructura de la Unión Europea y de la economía de Alemania. Merkel ha creado crisis que apuntalan su posición nacional, adopta siempre la postura del mejor acuerdo concebible que no fuerce la retirada y, al final, o bien llega a un acuerdo que efectivamente no la fuerce, o bien simplemente capitula, aplazando el problema hasta la próxima reunión del grupo que sea.» [AOS: ¿No les suena todo esto, en estos días, respecto de Alemania, el BCE y la UE, por un lado y Grecia, por otro?]

«Al final, los alemanes tendrán que absorber el costo de la crisis. Merkel, por supuesto, lo ha sabido siempre. Ha intentado e intenta forjar una nueva estructura europea a cambio de la inevitable capitulación de Alemania a Europa. Merkel ha comprendido que Europa y uno de los cimientos de la prosperidad europea, se resquebrajaban. Su solución es proponer una nueva estructura en la que los países europeos acepten la supervisión de Bruselas de sus presupuestos nacionales como parte de una solución sistémica para los alemanes. Algunos países rechazan abiertamente esta propuesta, mientras que otros están de acuerdo, a sabiendas de que nunca será implementada. El intento de Merkel de recuperarse mediante la creación de un aparato europeo aún más poderoso está destinado al fracaso por dos razones. En primer lugar y más importante, porque renunciar a la soberanía no es algo que hagan fácilmente las naciones -especialmente las naciones no europeas- y no en favor de lo que en realidad sería una estructura alemana. En segundo lugar, porque el resto de Europa sabe que no tiene que ceder, pues al final Alemania tendrá que firmar (con mucho, el resultado más probable) o la zona de libre comercio hará pedazos

«Si entendemos lo que es obvio, entonces las acciones de Merkel han sido y son plenamente comprensibles. Alemania necesitaba y necesita a la Unión Europea más que cualquier otro país, debido a su dependencia del comercio. Alemania no puede permitir que la UE se disuelva en naciones desconectados. Por lo tanto, Alemania constantemente faroleará y dará marcha atrás. Todo el drama griego es un paradigma de eso. Era Merkel quien estaba atrapada y, al estar atrapada, era predecible.»

«La cuestión del euro es interesante porque se cruzaba con el sistema bancario. Pero al centrarse en el euro, los inversores no han logrado entender que se trataba y se trata de una cuestión secundaria. La Unión Europea es una institución política y la unidad de Europa es lo primero. Los prestamistas han estado mucho más preocupados por la suerte de sus préstamos que los prestatarios. Y haga el Banco Central Europeo las sombras chinescas que quiera, terminará haciendo lo mínimo que pueda hacer para evitar la suspensión de pagos (default) -pero la evitará. (…)»

sábado, 18 de agosto de 2012

EL GRAN PROBLEMA DE ALEMANIA Y DE EUROPA (y II)



REPASO DEL PASADO Y PRONÓSTICOS DEL FUTURO EUROPEO (DESASTRES A, B Y C)

EL “DESASTRE C” DE EUROPA


Si por un momento logramos superar la angustia de la crisis española, ir conociendo el pasado y el presente de la situación económica (y política) europea resulta tan interesante como la mejor novela histórica de intriga… sólo que no es ficción, sino conocimiento, reflexión y expectación máxima sobre la realidad que hay y la que viene, de modo que, muy intrigados, estamos dentro de la “novela” como protagonistas, interactuando, cosa moderna a tope, porque, aunque seamos protagonistas muy secundarios, la intrigante “novela” afecta a nuestra vida diaria.

Seguidor desde hace meses de las frecuentes NewsletterThoughts from the Frontline”, (ése es el título genérico: “Ideas desde la primera línea”), que escribe John Mauldin (gracias, amigo Ignacio, por tu recomendación), me parece ver mucho más claro el tremendo embrollo en que nos han metido. Y, como advertí en el post anterior, en éste de nuevo hablaré yo poco y dejaré que lo haga John Mauldin en los términos de su letter, de 11 de agosto de 2012, que titula “And then there is Disaster C”, es decir, “Y luego está el Desastre C”. Esta carta de Mauldin contiene mucha información y numerosas consideraciones (algunas infrecuentes, como la sobria pero contundente afirmación de la responsabilidad alemana en la situación y el papel de la economía y la política de Francia) que me parecen muy sensatas y bien construidas. Traduzco la carta (lo que es bastante más difícil que leerla y entenderla) en su mayor parte, saltándome sólo algunas frases irrelevantes, para acortar en lo posible este post. Me parece que, ahora en agosto, aunque bastantes lectores no acudan al blog, los que aún lo siguen y los nuevos tienen más tiempo y las “entradas” pueden ser un poco más largas. Difícilmente leerán en español algo parecido al texto del analista estadounidense, que, insisto, tiene la ventaja de mirar los problemas de Europa desde cierta distancia, sin que ésta sea total ni suponga ignorancia, superficialidad o indiferencia. Como verán, Mauldin sabe muy bien lo que ha ocurrido y ocurre de verdad en Europa, España incluída, por supuesto.

Antes de dar nuevamente la palabra a Mauldin, un pequeño glosario de situaciones importantes: 1ª) El Tribunal Constitucional alemán tiene anunciada para el 12 de septiembre de 2012 sentencia sobre el Pacto europeo de disciplina fiscal (de 2 de marzo de 2012, firmado por 25 de los 27 países de la UE) y el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEDE) (o European Financial Stabilisation Mechanism: EFSM); 2ª) En otoño de 2013 (es decir, casi ya), hay elecciones generales en Alemania y Angela Merkel busca afanosísima un tercer mandato como Canciller Federal; 3ª) Y mucho más notoria: los EE.UU. han entrado en precampaña presidencial.

Como en el post anterior, cambio el tipo de letra y siembro todo lo que no es mío de comillas tipográficas. Los subrayados son siempre de mi cosecha. Dice Mauldin:

«He sostenido durante algún tiempo que Europa se enfrenta a dos opciones: el Desastre A, que sería la ruptura de la zona del euro o el Desastre B, la creación de una unión fiscal, lo que mantendría el euro más o menos intacto. Durante los últimos meses me he dado cuenta de que en realidad existe una tercera opción, que ahora se ve cada día más probable. Es bastante triste, porque la tercera opción es sólo un desastre C aún peor. Cada opción lleva consigo su propio conjunto único de problemas, pero el resultado de cualquiera de las opciones será que los pueblos de Europa se enfrentan a una seria recesión, si no a una depresión. Esto afectará el crecimiento mundial durante un tiempo nada corto y, dependiendo de la elección, podría sumir al mundo en una crisis tan mala o peor que la reciente crisis crediticia. En la carta de hoy nos fijamos en las tres opciones, mientras reflexionamos sobre cómo hemos llegado al fondo de un agujero tan profundo, excavando sin sentido.»

«“Breaking Up Is Hard to Do” (Romper es cosa difícil)»

«"Breaking Up is Hard to Do" fue escrita y cantada por Neil Sedaka [AOS: Un cantante super-cursi, horroroso: si fuese una referencia, habríamos de concluir que la música, en general, ha avanzado en inspiración, lo que es falso, como lo demuestran incluso datos editoriales y económicos]. Fue un hit # 1 hace exactamente 50 años esta semana. Y aunque que la canción se escribió para una época diferente, podría ser el tema central para gran parte de la Europa de hoy. »

«"No digas que éste es el final. En lugar de estar rompiendo, quiero que estemos construyendo de nuevo."

«Y, ciertamente, Europa se parece mucho a la familia disfuncional, aparentemente siempre al borde de la ruptura, pero agenciándoselas de alguna manera para arreglar las diferencias. Todos tenemos un familiar (o dos o tres) que causan este tipo de problemas. Vemos las peleas incesantes con inquietud, deseando que arreglen las cosas y sigan adelante. Nunca hacen frente a los problemas reales, ya que eso significaría afrontar demasiada angustia personal y tal vez les conduciría a admitir que el problema no está sólo en la otra parte. La euforia inicial de la relación se ha perdido en la realidad de la existencia cotidiana. Entonces, o lo arreglan o rompen.»

 «Este tipo de relaciones degeneran en co-dependencia, con la que nadie es feliz. Y el resto de nosotros somos susceptibles de dejarnos atrapar en ellas. A pesar de que es incómodo estar cerca de estas personas, no podemos librarnos de interactuar (…).»

«Europa volvió a actuar esta semana. En primer lugar, el primer ministro italiano, Mario Monti, concedió una entrevista a Der Spiegel, en la que advirtió de la desintegración de Europa si la Unión Europea permite que el euro falle: "La tensión que surgió en la zona del euro en los últimos años está empezando a parecerse a la desintegración psicológica de Europa". Recuerden que Monti es un primer ministro de compromiso, designado por un parlamento sacudido por el caos, a raíz de la retirada de Berlusconi. (…). Monti fue nombrado en lugar de ser elegido y es un primer ministro "tecnócrata". Dada la naturaleza de la política italiana, lo ha hecho tan bien como podía esperarse. Tiene un curriculum vitae excepcional y es parte de la élite europeísta que defiende la visión de una Europa unida.»

«La entrevista era sobre todo el ruido político estándar emitido por los centros europeos de poder [AOS: “ruido político standard” -¡buena expresión!-, pero de todos los centros de poder, incluidos los estadounidenses, amigo Mauldin]. Hubiera pasado desapercibida excepto por un pequeño detalle. El primer ministro italiano sugirió que los jefes de los gobiernos nacionales de la UE tomen decisiones de forma independiente de los parlamentos de sus países.»

«"Si los gobiernos están atados por las decisiones de sus parlamentos, la falta de libertad de acción se traducirá en la ruptura de Europa, en lugar de una integración más profunda ..." ¿Estaba el primer ministro escuchando lo que decía? Permítanme parafrasearle: "¿Cómo podemos mantener el euro juntos si tenemos que escuchar a esos molestos parlamentos, elegidos por los votantes reales" ¿Dice esto antes de la sentencia del Tribunal Constitucional de Alemania el 12 de septiembre, cuando el liderazgo alemán anda de puntillas, suponiendo un resultado "positivo", pero sabiendo que nada es seguro? ¿Y lo hace en una de las publicaciones más importantes de Alemania? (…). Esta estúpida declaración debe haber disgustado incluso a sus más ardientes partidarios.»

«Claro está que la declaración tuvo una respuesta rápida en toda Europa, y especialmente en Alemania. Los políticos alemanes de todo el espectro reaccionaron con furia a las advertencias de Mario Monti de que el control del Bundestag sobre las políticas de deuda de la UE amenaza con provocar la "desintegración" del proyecto europeo. "Tenemos que dejar claro al Sr. Monti que nosotros, los alemanes, no desconectaremos nuestra democracia para pagar las deudas italianos", dijo Alexander Dobrindt, secretario general de los cristianos sociales de Baviera (CSU). "(Ambrose Evans-Pritchard, The Telegraph

«En la añeja tradición de giro político y "aclaración", Mario Monti regresó casi de inmediato ante la prensa para insistir en que las palabras que dijo no eran las que quería decir. El periódicol italiano Il Libero publicó una foto en primera página de Angela Merkel, bajo el título "El Cuarto Reich". Y la cosa se ponía peor en cuanto empezabas a mirar por ahí.»

«Para mostrar mi propio talante ecuménico, permítanme señalar que los líderes alemanes tienen su propio conjunto de problemas. Sobre todo y muy simplemente, no le han dicho al pueblo alemán lo que cuesta permanecer en la zona euro o salir de ella.»

«En las últimas semanas hemos visto las dos opciones principales que se enfrenta Europa. Vamos a llamarlas Desastre A y Desastre B. El desastre A sobreviene si deciden una estrecha unión fiscal, lo que supondrá una sustancial renuncia a la soberanía nacional (aunque no se venderá de esa manera a los votantes) También significaría que los estados del norte (Alemania, Países Bajos, et al.) tendrían que asumir una gran carga de impuestos con el fin de compartir esfuerzos con sus vecinos del sur y pagar las masivas deudas que éstos han acumulado.»

«Por supuesto, Alemania ayudó a crear el problema, con sus bancos regionales (Landesbanks) financiando con entusiasmo las deudas de los diversos gobiernos periféricos y de sus ciudadanos. Tengan en cuenta que cuando el gobierno alemán revocó su garantía a los bancos regionales, el costo de sus préstamos aumentó significativamente. Los bancos comenzaron a "lograr beneficios", no sólo con la compra de la deuda subprime de EE.UU. (que arruinó a algunos de ellos), sino también de enormes cantidades de deuda soberana periférica europea.»

«El entero plan de rescate griego trataba realmente sobre el uso del dinero de los contribuyentes "europeos" para pagar las deudas de los bancos alemanes y franceses. Lo mismo vale para los restantes rescates anteriores. Ahora nos toca salvar el euro (con el rescate de España), que es un proyecto aún más costoso.»

«Inciso: El presidente del BCE, Draghi, hizo una famosa frase hace una semana al afirmar que estaba dispuesto a hacer "lo que fuese necesario" para salvar el euro, un mensaje que fue compartido por Merkel, Monti y Hollande en los días siguientes. Una semana más tarde nos dimos cuenta de que "lo que fuese necesario" no incluía el uso de dinero EFSF [AOS: European Financial Stability Fund] para comprar bonos españoles (al menos por ahora y hasta la sentencia del Tribunal Constitucional de Alemania, el 12 de septiembre). ¿Les preocupa a Vds. qué apostar sobre lo que sucederá después de esa sentencia? Yo apuesto a que será un compromiso de algún tipo, para permitir que el EFSF o el BCE financien. Draghi dijo, después de todo, que simplemente estaba esperando a una solicitud formal antes de comprometer fondos. Y el Presidente español Rajoy está esperando hasta el 12 de septiembre, tal vez porque quiere saber exactamente lo que va a estar aceptando si pide ayuda

«Hay una regla no escrita en los procedimientos jurídicos y políticos: no hacer una pregunta si uno no sabe ya la respuesta. Si España pide un rescate y, a continuación, por cualquier razón política, en realidad no puede cumplir con las normas de austeridad, entonces eso sería peor que no pedir

«Pero no son sólo los contribuyentes del norte (Alemania) los que se verán afectados. Los de los países del sur tendrán que soportar serias medidas de austeridad con el fin de conseguir el dinero, lo que significa mayor desempleo y más profundas recesiones, cuando no depresiones. No hay almuerzo gratis.»

«Y luego está el Desastre B: la ruptura de la zona euro, de un modo u otro. Mi compañero de pesca en Maine, Josh Rosner, incluyó este gráfico de Der Spiegel en un informe muy impresionante que me envió sobre el coste para Alemania de abandonar o de permanecer en el euro (…). Demuestra que en realidad es mucho más costoso para Alemania a abandonar el euro. También está de acuerdo conmigo en que los dirigentes alemanes no están diciendo a su gente cuáles son los costes de cualquiera de las dos opciones.»

«Vean que a ningún país le va bien en una ruptura. Sin embargo, los resultados varían, pues algunos tendrían una inflación grave y otros, deflación, mientras que todos verían un significativo aumento del desempleo.»



El 56% de los alemanes quieren que su gobierno "haga todo" para salvar el euro, con un 76% que dice que una ruptura del euro sería mala para Alemania. Además, el 64% de los alemanes cree que el euro va a sobrevivir, aunque el 84% cree que la crisis va a empeorar y el 56% se preocupa de que la economía se deteriorará el próximo año. Finalmente, el 70% cree que Merkel está haciendo un buen trabajo. (Fuente: Bloomberg, al informar sobre un sondeo de ARD TV)»
«“Y está también el Desastre C”»
«Todavía hay una tercera opción, que puede estar convirtiéndose en la elección du jour. Y consiste en que, en vez de optar de una manera directa por la unión fiscal y por un respaldo de toda la eurozona a los bancos, etc., o por alguna clase de ruptura, los líderes europeos no hagan otra cosa que tratar con los problemas inmediatos que se les presentan, pasando de una crisis a otra en una deriva slow motion hacia la unión fiscal
«Puestos a detallar lo que significaría una unión fiscal real y su coste, se acaba por tener que pedir a los votantes que aprueben algo y los líderes europeos no saben lo que los votantes dirán. ¿Qué pasa si dicen que no, nein, no, nao, ochi, nee, neen, cha toigh leam, o ei? Hay muchas maneras de decir "no" en Europa.»
«Y por eso el Sr. Monti se siente frustrado con todo el proceso parlamentario para hacer frente a la crisis del euro. Todo se pone muy complicado cuando hay que explicar a los votantes exactamente por qué y cuánto deberían pagar por tu personal visión de su futuro. "Si los gobiernos están atados por las decisiones de sus parlamentos, la falta de libertad de acción se traducirá en la ruptura de Europa, en lugar de una integración más profunda." (…)»
«¿En quién confías?»
«La Unión Europea es una criatura bastante extraña. Cuenta con un parlamento que es ampliamente visto como una broma, con el trabajo real realizado por diversas comisiones designadas por los líderes nacionales y tal vez ratificado por el parlamento de la UE. Tal como yo lo veo, la mayoría de los europeos están en contra de Bruselas, en lugar de contra el euro. Ven a Bruselas como una creación de la burocracia.»
«Esperan que sus propios gobiernos nacionales hagan el trabajo duro de gobernar y protegerlos de los peores problemas europeos. Serían reacios a renunciar a su soberanía nacional en la misma forma que los Estados lo hacen en los EE.UU.» [AOS: ¡reaparece la comparación que últimamente está haciendo fortuna! Es explicable que se estalezca, pero algunos -no Mauldin, que la limita bien- utilizan la comparación para proponer que hagamos los europeos lo que hicieron los hoy estadounidenses. A mí me parece muy claro que las situaciones históricas son extremadamente diferentes]
«Y si nos remontamos a la fundación de los EE.UU., se ve que las actitudes europeas modernas no son en absoluto diferentes a lo que los americanos del siglo XVIII sentían acerca de Washington DC. Washington, el hombre, era más importante que lo que la mayoría aprecia, pues proporcionó al temprano gobierno gran parte de su legitimidad. Las visiones de Jefferson y Hamilton y el resto de los padres fundadores llevaron a algunos serios desacuerdos y a una pública disensión. La elección de 1800 fue quizás la más amarga y polémica en la historia de EE.UU., más desagradable que la de hoy ("Si Jefferson es elegido todas las iglesias serán cerradas", etc.) Y luego estaba esa pequeña disputa sobre derechos de los Estados que llegó al punto de ebullición en 1860.»
«Si en 1792 los políticos hubieran intentado vender a los votantes una unión fiscal completa como razón para votar por la Constitución, hoy podríamos estar debatiendo todavía los Artículos de la Confederación.»
Y ése es el quid del problema de Europa. Los costes de la elección entre ruptura o unión fiscal son tan altos y cargados de desacuerdos que pedir a los votantes elegir con pleno conocimiento de los costos sería hacer la pregunta sin conocer la respuesta. ¿Por qué no elegir una unión fiscal light? En lugar de intentar llegar a la meta de un salto enorme, ¿por qué no dar una serie de pasos más pequeños? Dejar que la olla se caliente poco a poco, en lugar de ponerla a hervir rápidamente. Al igual que la rana del cuento, en el momento en que los votantes europeos se den cuenta de lo caliente que está, será demasiado tarde para saltar de la olla.»
«El inconveniente consiste en que ésa podría ser la ruta más costosa a largo plazo. Significaría saltar de crisis en crisis, con cada crisis más difícil y costosa de resolver (aunque no lo suficiente para que todos abandones). Cuanto más tiempo el proceso se alargue, más caro será.»
[FRANCIA ENTRA DE LLENO EN EL “DESASTRE” EUROPEO]
«Conocemos los problemas españoles e italianos. Lo que los líderes europeos no han reconocido (y de hecho la mayor parte del mundo tampoco, por lo que veo) es que Francia es el verdadero problema. Francia se desliza hacia un desenlace de proporciones bíblicas. Dentro de pocos años será tan problemática como es España hoy en día. Francia está metida en un muy, muy profundo foie gras
«Alemania cree que tiene un socio AAA por sus garantías de la deuda europea en la EFSF, el ESN [AOS: European Stability Mechanism, el último invento contra la crisis de la deuda], etc. Lo es hoy en día, pero Francia perderá muy pronto que la calificación de AAA, en ausencia de cambios significativos que no se van a ser da con Hollande y los socialistas . Podría suceder ya en septiembre, aunque dudo de que Moody o S & P se muevan antes de la sentencia del Tribunal Constitucional alemán, el día 12 (¡a menos, por supuesto, que realmente quieran demostrar su independencia de criterio y de las consideraciones políticas del momento!)»
«Y esa bajada de calificaciones será sólo la primera de muchas. Francia está en trance de aumentar los impuestos a "les riches" o los que ganan más de € 1 millón, hasta una hemorragia nasal del 75%. ¿Por qué quedarse en Francia, cuando uno se puede mover, pagar menos impuestos y hacer una visita cuando quiera? La nueva ley va a a determinar un descenso, no un aumento de la recaudación de impuestos, como se ha demostrado por las recientes alzas de impuestos estatales a los ricos en los EE.UU. La gente vota con sus pies.»
«En Francia no es sólo el impuesto sobre los ricos que está creando problemas, sino otras muchas acciones, como reducir la edad de jubilación a los 60 años, a pesar de que las personas viven más y hay menos personas que pagan al sistema a medida que envejece la nación. Francia tiene un problema de títulos de crédito a corto plazo por lo menos tan severo como el de EE.UU., pero el gasto del gobierno es ya el 55% del PIB.»
«En el momento en Francia se convierta en el problema claro, los votantes europeos se habrán comprometido tanto con el proceso que alejarse será mucho más costoso de lo que sería hoy. A menos que Merkel pueda convencer de algún modo a Hollande de que reduzca realmente el gasto social de forma dramática en los próximos años, el día del juicio final llegará. ¿Y cómo ha resultado para España, Grecia y otros la política de reducción del déficit? Si vamos a eso, Alemania incurre en violación de las normas de déficit del tratado.»
«Mi conjetura: será el Desastre C, que se traducirá en una más larga y pronunciada recesión con depresión en gran parte de Europa. Podría haber movimientos de masas para abandonar el euro en cierto número de naciones. Si bien ahora no hay algo cercano a una mayoria para ese cambio en ningún país ni en ninguna encuesta que haya visto, se trata de una minoría cada vez mayor.»
«Como parte de este proceso salvar-el-euro, espero firmemente que en algún momento habrá un mecanismo que permita al BCE monetizar la deuda y la compra de bonos periféricos en una escala muy grande. Estamos hablando de muchos billones de euros, ya que una vez que ese proceso se pone en marcha para un país, el proceso debe continuar hasta que el país haya puesto su déficit bajo control y esté creciendo de nuevo. Ya sea porque la ESM se convierta en un banco o porque se le permita emitir bonos que el BCE pueda utilizar como garantía o mediante cualquiera de otros diversos mecanismos que se proponen, la única fuente real de poder adecuado es el Banco Central Europeo. Más pronto o más tarde, los alemanes tendrán que soltar la correa al BCE y eso no será bueno para el euro. Y definitivamente nada bueno cuando ocurre que Francia es el problema.»
«El corolario de esta perspectiva es que el problema del euro no va a desaparecer en años. Nos dará la fatiga euro, igual que la fatiga griega, pero más grande. Esto va a ser muy parecido a lo que era, en los días de mi juventud, un viaje muy largo a través del país en un coche sin aire acondicionado en pleno verano, con tres niños pequeños y una suegra malhumorada. Permanezcan en sintonía.»
Yo apuesto también por el “Desastre C”, muy consonante con las enormes dificultades de las dos primeras opciones y con el modo de ser de los dirigentes políticos actuales, acostumbrados a actuar sobre lo inmediato (y con recetario muy rígido) mucho más que a reflexionar y entre los que, además, no se ve a nadie con una gran autoridad personal, que le sea reconocida por los demás y le haga idóneo para un neto liderazgo en un momento histórico crucial. Por tanto, está claro que esta novela de la crisis, en la que los “lectores” somos protagonistas vivos, tiene intriga para rato, para un rato muy largo. No podemos interactuar escribiendo el gran guión a diario. Pero podemos y debemos actuar espabilando de lo lindo -emprendiendo y procurando cambios (ante todo personales), pequeños quizá, pero no insignificantes- y trabajando muy duro. Eso es lo que nos toca hacer, en vez de deprimirnos o de alimentar una ira interminable, agotadora y perfectamente inútil. Instalarse en la ira (y en la envidia, como veo en muchos comentarios) no es en absoluto lo mismo que pedir y promover reformas.