domingo, 24 de octubre de 2010

EL NUEVO GOBIERNO DE ESPAÑA, PENÚLTIMA IMPOSICIÓN A ZAPATERO (y II)


EL AUTO-GOLPE EN EL PSOE: EXPLICACIÓN, CONSECUENCIAS Y SITUACIÓN DEL PARTIDO POPULAR

Decía el pasado viernes, 22 de octubre de 2010, en este blog, que los ingredientes del nuevo Gobierno, anunciado dos días antes, me produjeron dos fuertes impresiones. La primera, que ése no era un Gobierno de Rodríguez Zapatero (ZP); la segunda, que ese Gobierno, impropio de ZP, parecía la consecuencia de una imposición. Añadí que, unos días después, las impresiones se habían convertido en certezas: el nuevo Gobierno español es el fruto de una imposición desde dentro y de ahí el subtítulo de aquel “post” y de éste: auto-golpe del PSOE y en el PSOE. Prometí explicarme y me explico ahora, algo antes de lo que pensaba. Es probable que lo que voy a decir pase a ser de público conocimiento antes o después (he visto el comentario de un blogero en una conocida publicación internética que acierta de lleno), porque muchas cosas ocultas suelen acabar sabiéndose, pero tampoco me extrañaría que todo siguiese pareciendo, a casi todos, una jugada inteligentísima de ZP.

EXPLICACIÓN

Un Gobierno con Rubalcaba de Vicepresidente Primero (más el Ministerio del Interior) en vez de De la Vega, con Jáuregui en Presidencia y sin Bibiana Aido, la niña bonita de ZP, sin Moratinos (“un fenómeno”, según ZP) y con otra Ministra degradada a Secretaria de Estado, no encajaba y no encaja con la personalidad de ZP y con sus más claras inclinaciones personales, de las que nunca se ha apartado. Alfredo Pérez Rubalcaba jamás había “sonado” en el entorno de ZP (entorno que no es igual a los diversos ambientes del PSOE) como Vicepresidente primero en sustitución de la desgastadísima De la Vega, cuya capacidad de coordinación siempre fue entre escasa y nula, pero que, en el último año, ya no podía colar una imagen de eficacia y todos los días era puesta en entredicho por los desacuerdos públicos de miembros del “Gobierno de España”.

Rubalcaba (R, a partir de ahora) nunca ha estado en el núcleo político de ZP. Venía del felipismo y se sabía que no había contribuido a la designación de ZP como Secretario General del PSOE. Por otra parte, R siempre ha sido lo que se llama un “hombre del Grupo PRISA” (EL PAÍS, la SER como emisora de radio, Canal Plus, CNN Plus, etc.), con el que, dicho suavemente, ZP no sintonizaba y frente al que ZP contribuyó decisivamente, mediante el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y otras herramientas, a crear otro grupo mediático más nítidamente izquierdista, Mediapro, con un canal de TV (la Sexta), el diario PÚBLICO y una productora cinematográfica, etc., grupo que ha sostenido una dura pugna con PRISA. Finalmente, R puede considerarse, además de un superviviente (por sus cualidades y su saber estar),  si no un gran político ni un estadista, sí un verdadero peso pesado de esta política que hay, mientras que ZP es infinitamente más ligero y mucho más débilmente pertrechado, individual y socialmente, que R. Las encuestas oficiales más recientes situaban a R como el único miembro del “Gobierno de España” relativamente bien valorado, muy por encima de un ZP en fuerte y acelerado desprestigio. Todos estos rasgos, entre otros, hacían bastante inverosímil un ascenso tan espectacular de R ("hombre de PRISA", insisto) de la mano de ZP. La magnitud del ascenso fue inmediatamente captada por los “medios”, pero, por lo visto, no consideraron inverosímil ni excesivamente asombroso que ZP hubiese decidido el encumbramiento de Rubalcaba.

Para mí, eran demasiados sapos, y demasiado indigestos, los que ZP había engullido. Podía admitir la desintegración de su equipo femenino (dicho sea así por abreviar), pero además la promoción máxima de Rubalcaba, tragándose el “sapo” de PRISA y el nombramiento de Jáuregui, que tampoco ha sido zapaterista, me parecía un atracón de batracios excesivo para que ZP se hubiese entregado a él por su gusto y voluntad propios. Con todo, mi impresión de gran “gato encerrado” no impidió que me preguntase (y preguntase a algunos amigos): ¿ha hecho esto ZP para recuperarse como candidato a Presidente de Gobierno en el 2012 (y lo dudaba, porque no atribuyo a ZP cualidades intelectuales y anímicas suficientes para urdir ese plan) o lo ha hecho porque ha tirado la toalla y, ya en estado de abandono, otros han diseñado el nuevo Gobierno?

No me interesaba la cuestión por curiosidad sobre los detalles históricos, sino porque el futuro de este país podría variar mucho según fuese la respuesta acertada. De tratarse de lo primero, que consideraba muy improbable, significaría que ZP se empeñaba en ganar él, resultado a mi entender casi imposible, por mucho que cambiase de equipo. Porque ZP era ya un pobre pelele político, con una dificultad extrema de recuperar credibilidad alguna. De tratarse de lo segundo, se había abierto la sucesión de ZP en el PSOE y, en esa línea, R al frente de un Gobierno mejor que el anterior (para lo que tampoco hacía falta mucho, la verdad) significaba una altísima probabilidad de que el escenario de las elecciones generales de 2012 fuese muy distinto del anterior al cambio de Gobierno: un candidato del PSOE que no sería ZP, un candidato quizá capaz de recuperar al electorado del PSOE inclinado a la abstención y de atraer al menos buena parte del millón de votantes que no constituyen una clientela político-electoral segura.

De la pregunta anterior, que acabo de explicar, a plantearme si acaso no le habían torcido la mano por completo a ZP y había formado el nuevo Gobierno por irresistibles presiones, había un pequeño paso. Y se daban indicios poderosos en apoyo de esta última posibilidad. Uno era el evidente apresuramiento con que toda la operación de cambio se había ejecutado. Otro era la respuesta “sólo el cambio de Corbacho” de ZP, apenas tres días antes de un cambio muy distinto. Si era ZP quien de verdad había pensado y decidido el cambio amplio y profundo, ¿qué necesidad tenía de mentir cuando a nadie le hubiera parecido mal un cambio amplio e incluso se lo habían pedido públicamente algunos importantes personajes del PSOE?

Pensando en la hipótesis de un cambio forzado, ¿quién podría haber ejercido sobre ZP tan fuerte presión, que requería comunicación personal? Desde luego, no sólo ni principalmente R, pues no hubiese sido en absoluto suficiente y, además, R no acostumbra a meterse en berenjenales de los que no piense que puede salir triunfante. Tampoco otros miembros del “Gobierno de España”. De ningún modo el Rey ni personajes extranjeros. Nunca Felipe González, al que ZP no traga, y al que no sería fácil que ZP recibiese y ni siquiera que se pusiese al teléfono. No quedaba sino una presión fuerte y concertada de distintos “barones” del PSOE, capaces todos o muchos de ellos de hablar en directo y privadamente con ZP. Que esas presiones se ejerciesen en contacto con algunos miembros del todavía “Gobierno de España” sería muy probable, pero con éstos en segundo plano.

Así las cosas, hago preguntas aquí y allá. Y me encuentro con que, en efecto, mis sospechas se corresponden con lo sucedido. En forma de relato y a grandes rasgos (no tengo todos los detalles y no puedo ofrecer los que conozco), la realidad ha sido ésta: ante el anuncio por ZP de un único cambio, se le dice de inmediato, por varios pesos pesados, que nada de eso, porque hace falta ya un cambio más amplio y de mucha más enjundia, empezando por poner orden y control en el PSOE, porque, tras el triunfo de Tomás Gómez en las "primarias" de Madrid, es evidente que no se tiene ese necesario control y que, por ese camino, las listas de candidatos electorales de las elecciones autonómicas pueden ser ocasión de espectáculos fatales para el partido.

ZP, muy desanimado con el episodio del triunfo de Gómez sobre su candidata Trinidad Jiménez, no puede negar que el partido está descontrolado. Y con el ánimo muy tocado, él, que con el único cambio de sustituir a Corbacho renunciaba a un nuevo Gobierno similar al que muchas veces había soñado (¿recuerdan la insistencia en situar a Chacón como sucesora de De la Vega?, p. ej.) porque intuía que no estaba el horno para esos bollos, se resiste fuertemente a lo que se le propone y plantea un escenario de claro abandono de la batalla por su parte. Ante tal escenario inmediato, la presión se recrudece y es fortísima: ¿acaso quiere entregar el poder en bandeja al PP? ¡Nada de derribar las columnas y “caiga Sansón con todos sus filisteos”! Se le convence para que siga, pero con arreglo a una partitura nueva.

Para empezar (y aquí aparecen las “consecuencias” del fiasco en Madrid), controlar el PSOE y que Pagín deje de mandar (o de enredar) en y desde Ferraz. Póngase en su lugar a alguien seguro y experimentado para ese puesto: Marcelino Iglesias. Políticamente desgastada De la Vega, R debe ocupar el puesto: tiene autoridad, “comunica” bien y es clave para el fin de ETA, la única operación política con la que se podría levantar cabeza (dando ya por imposible arreglar lo económico). Jáuregui sería también muy apropiado a tal efecto. Hay que complementar el cambio con algún detalle de austeridad, así que fuera dos Ministerios insustanciales, aunque no se ponga en la calle a sus titulares. No se puede abandonar a Trinidad Jiménez después de su sacrificio en la batalla del PSM: por tanto, a Exteriores, su sueño de siempre (se sacrifica a Moratinos, un hombre empecinado en encaminar la política exterior hacia metas erróneas: Medio Oriente, Venezuela, Cuba, etc). A Pajín (que inicialmente se decantó por Tomás Gómez), ya sin mando  en el PSOE, tampoco sería bueno dejarla fuera, porque “cantaría” mucho como reconocimiento de los tremendos errores cometidos: désele un Ministerio (el que ocupaba T. Jiménez). Y así se compone el cuadro, torciendo la mano a ZP. Se trata de levantar cabeza (o intentarlo), de controlar el PSOE y de, en esa situación, ver qué sucede con las autonómicas y municipales, procurando que los resultados sean mejores de los esperados. A la vista de esos resultados, se decidirá quién es el candidato del PSOE para las generales de 2012.

He titulado estos “post” hablando de “penúltima imposición a ZP”, porque tengo para mí que, ocurra lo que ocurra en las más próximas elecciones, a ZP se le impondrá, si fuese necesario, abandonar cualquier pretensión de protagonismo. Si sienten curiosidad por saber qué “barones” han podido intervenir en la historia, no tienen más que recordar los que han estado pronunciándose públicamente en la misma exacta línea del nuevo Gobierno: Barreda (Castilla La Mancha), Fernández Vara (Extremadura), pero no se debe descartar a Griñán (Andalucía), que ya había impedido el acceso (presentado como seguro) de Gaspar Zarrías al Ministerio de Trabajo. No cabe descartar siquiera a Chaves, al fin y al cabo Presidente del PSOE. Que Felipe González estaría detrás es poco dudoso, como lo es que R no estuviese precisamente en la inopia. El multimillonario y agrio ex-Presidente González hizo unas muy significativas declaraciones sobre el desenlace de la crisis: “en el momento en que está más machacado estamos viendo al mejor Zapatero”. Lo más interesante de esa frase es el adjetivo “machacado”. Luego elogia el manejo de los tiempos por ZP, etc., para redondear la faena con un toque irónico-cínico muy refinado y a la pregunta sobre si el nuevo Gobierno encierra una “clave sucesoria”, responde, tras fingir que se lo piensa un poco: “pues no lo sé, pero es una muy, muy buena pregunta para Zapatero, que seguro que no va a contestar”. Curiosamente, bastantes medios hacen decir a González que Zapatero va a contestar. He visto el vídeo y dice que no va a contestar. Rechufla de González al que se le ve encantado ejerciendo de gurú sobre los problemas planetarios, mientras sobrevuela, en su grandeza, la pequeña península ibérica.

CONSECUENCIAS

La primera es, sin duda, que ZP es ya un cadáver político, con acta de defunción y todo (la que supone este lance del nuevo Gobierno), aunque el sepelio pueda demorarse aún bastante tiempo (o incluso quede sin celebrar: no sería el primero). En política, algunos muertos resucitan, pero se requiere que sean conscientes de que se han muerto, porque, de lo contrario, no pueden resucitar: axiomáticamente, sólo los muertos resucitan. Y se requieren también unas ayudas externas de reanimación, que en el caso de ZP no veo posibles, porque ya carece en el PSOE de huestes con mínima fuerza. Pero ZP se ha recuperado anímicamente y se está mostrando en estos últimos días como si a él se le hubiese ocurrido el cambio y él lo hubiese hecho. Ya está de nuevo auto-engañado y reenganchado a la mentira y al engaño. El hombre ha dicho esto: “sólo hay que ver la cara de los del PP para saber que hemos acertado”. La cara de los del PP era un poema, que no hubieran debido recitar, de preocupada perplejidad. Pero la cara de ZP es sencillamente inefable. Acorde con su perfil psicológico y su escala de valores (por así llamarla irónicamente), su alegría es real porque, a fin de cuentas, su primer valor es mantenerse y, en efecto, sigue siendo Presidente y empieza a darse cuenta de que a él no le va mal tampoco con el cambio, siempre que se olvide de cómo se ha producido, cosa no difícil cuando prevalece seguir en el puesto. Con todo, es un cadáver, que, no sólo no sabe o no reconoce que se ha muerto, sino que reanuda la vida con entusiasmo. Así no puede resucitar.

La segunda consecuencia es que probablemente el nuevo Gobierno no cometerá los diarios y gruesos errores que cometía ZP & Co. Eso mejorará el futuro del PSOE.

La tercera es ésta: en las elecciones de 2012 el Sr. Rajoy y el Partido Popular (PP) no tendrán enfrente a ZP (un enorme “bonus” electoral para el PP) sino, muy probablemente, a un personaje con mucho más fuste y sin el incomparable desprestigio de ZP. No serán ya unas elecciones en las que van a ganar por goleada a causa, exclusiva o principalísimamente, de que el adversario las va a perder estrepitosamente.

La cuarta consecuencia es que como tampoco el nuevo Gobierno está compuesto mayoritariamente por excelentes o buenos políticos (pero, ¡por Dios! ¿nos hemos olvidado ya de lo que fue el felipismo?) y no va a preocuparse de gobernar y de gobernar bien, porque está hecho sólo para las elecciones, el panorama sigue presentando la misma negra oscuridad que antes para la generalidad de los ciudadanos.

LA SITUACIÓN DEL PARTIDO POPULAR

Frente a esas consecuencias, veamos lo del Partido Popular (PP). Si desde hace muchos años sostengo que es un error afrontar las citas electorales pensando sólo en la debilidad del adversario, la actitud del PP desde hace demasiado tiempo me ha parecido y me parece -hay en este “blog” bastantes rastros- perezosa, improvisada a golpes de ocurrencias ocasionales, desnortada y, por supuesto, con un enfoque electoral equivocado. No consta un mínimo programa del PP. Lo podrían hacer, pero, al parecer, no les importa ni les interesa a los ocupantes de la "cúpula". Bastantes de los actuales dirigentes “populares” carecen de conocimientos y de criterios en muchos asuntos importantes. El liderazgo es endeble, porque, aunque no se registren ya voces críticas y actuaciones discrepantes (excepto la de Asturias), el líder es personal y políticamente endeble y eso tiene consecuencias indisimulables. El Sr. Rajoy, situado como sucesor de Aznar por designación digital de éste, que nadie se atrevió a discutir cuando muchos la consideraban errónea, puede, ciertamente, “ponerse las pilas” y moverse más, pero no puede dejar de ser quien es y como es. Existe el riesgo incluso de que, al moverse más, muestre más flancos débiles, que no serán tratados como los trataba ZP & Co., sino de modo más inteligente y demoledor.

Por otra parte, un cambio de líder en el PP o incluso un cambio radical de equipo se puede descartar, salvo desastre en las próximas elecciones autonómicas y municipales, desastre poco probable y que habría de ser innegable o indisimulable, para constituir el catalizador de cambios serios. El panorama del PP no presenta ni el más mínimo elenco de personajes que pudieran sustituir a Rajoy. Seguramente, entre las personas del PP que ocupan cargos en toda España y entre todos los diputados, senadores y eurodiputados, sí haya personas de valía, mejores que las de la actual "cúpula". Pero yo no las conozco ni son más o menos conocidas por el común de los votantes, ni desde Génova las van a dar a conocer. Hay dos personas, ambas residentes en Madrid, que, como todo el mundo sabe, no carecen de partidarios como reemplazo de Rajoy. Pero, ahora mismo, también suscitan intensos rechazos dentro del PP. Ésta no es su hora.

En suma: ante el nuevo Gobierno, que aún no han entendido en la citada "cúpula" del PP (y eso que son políticos profesionales), me temo que el PP no va a reaccionar apropiadamente. Van a seguir centrados en ZP y luego ZP va a desaparecer, con lo que el "argumentario", como le llaman, va a quedar en el aire. De modo que si el panorama sigue siendo muy oscuro para la generalidad de los españoles, para el PP la cosa se pone peor. Hay quienes, a sabiendas de las debilidades de Rajoy, quieren, sin embargo, con todas sus fuerzas la derrota del PSOE de ZP. Es una posición extendida y comprensible, pero es que el PSOE de ZP ya no me parece que sea el otro término de la alternativa. Ahora se trata del PP de Rajoy o del PSOE postzapateril.

2 comentarios:

Huber dijo...

Excelente reflexión y creo que muy cerca de la realidad. Toda la historia hiede a pretorianos portando cuchillos.

Humberto Vadillo

Jaime de Andrade dijo...

¿Qué hacer después de haber visto que el PP, con mayoría absoluta, no echó atrás en materia de aborto? Algunos hemos decidido no "darles" el voto, ni "tapándonos las narices" ni con la doctrina del mal menor. Si un par de millones de electores hicieran lo mismo, no "darles" su voto, a lo mejor escarmentarían. El caso es que no tenemos a quien votar.